La guerra en Ucrania está haciendo subir no solo los precios de los productos energéticos o de los insumos industriales importantes, sino también de los productos agrícolas y especialmente de los cereales. Esto aumenta el riesgo de que este año estalle una crisis alimentaria en algunos de los países.
África subsahariana en problemas
África es el continente más vulnerable a la escasez de alimentos. El Fondo Monetario Internacional estima que los países del África subsahariana en particular enfrentarán graves problemas causados por un enorme shock negativo de la oferta. Son las economías de los estados locales las que están menos preparadas para semejante choque externo.
La crisis alimentaria puede aumentar la presión sobre los países africanos que aún no se han recuperado de los efectos de la pandemia de coronavirus. La población de allí corre el riesgo no solo de una nueva caída de los ingresos reales, sino también de un aumento de la deuda y la consiguiente caída en una pobreza aún mayor.
La RDC y Madagascar serán los que más sufrirán
Un informe del Fondo Monetario Internacional afirma que países como la República Democrática del Congo o Madagascar corren el mayor riesgo de sufrir la crisis alimentaria. Los alimentos representan el 40 por ciento del consumo total de los hogares, la mayor proporción de cualquier país. Estos países ya han pedido ayuda al Fondo Monetario Internacional.
