Los científicos británicos y estadounidenses han encontrado una manera de reciclar mejor las baterías de los automóviles eléctricos, reduciendo significativamente no solo el costo de su producción, sino también las emisiones de gases de efecto invernadero.
La racionalización del reciclaje de baterías de automóviles eléctricos es un paso importante en el contexto del aumento esperado de la demanda de automóviles totalmente eléctricos. Un equipo de investigadores estadounidenses y británicos ha encontrado una forma de extraer más material de baterías obsoletas que antes.
El método actual de reciclaje se basa en la trituración del material reciclado en pequeños trozos y su posterior procesamiento y producción de un nuevo componente, o en el uso de pirometalurgia. Sin embargo, ambos procedimientos son muy costosos. Los investigadores ahora han utilizado el llamado reciclaje directo, que puede ahorrar componentes importantes de la batería (especialmente el cátodo con ánodo) y reducir drásticamente el consumo de energía y, por lo tanto, los costos de reciclaje.
Los investigadores que trabajan en el proyecto ReLib en el Instituto Faraday han descubierto que las ondas ultrasónicas y los cátodos de ánodo se pueden reciclar con un reciclaje directo suave sin la necesidad de triturarlos primero. Se estima que esto podría ahorrar hasta un 60 por ciento del costo de usar un material completamente nuevo para fabricar una batería.