El producto interno bruto de la segunda economía más grande del mundo creció más en el primer trimestre de lo que esperaban los analistas. Sin embargo, otros indicadores de auge sugieren una fuerte desaceleración en los próximos meses.
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La economía de China creció un 4,8 por ciento interanual entre enero y marzo de este año. Los mercados y los analistas esperaban un crecimiento de solo 4.4 por ciento. Desde este punto de vista, es, por tanto, una sorpresa positiva. En términos intertrimestrales, la economía de China creció un 1,3 por ciento, el doble de la tasa de crecimiento que se espera ampliamente.
Pero es muy probable que sea el último resultado sólido para los próximos trimestres. Las ventas minoristas de marzo cayeron un 3.5 por ciento interanual, con una disminución esperada de solo 1.5 por ciento. Mientras tanto, tan recientemente como enero y febrero, los hogares chinos gastaban casi un siete por ciento más que hace un año.
Venta de bienes raíces residenciales
También se produjo una desaceleración significativa de la inversión corporativa. Mientras que para febrero y enero hubo un crecimiento interanual de más del 12 por ciento, durante todo el primer trimestre la inversión aumentó solo en un 8.5 por ciento. Solo en marzo, las ventas de propiedades residenciales cayeron significativamente, un 26,2 por ciento interanual. Es la mayor caída de los últimos dos años.