Durante la sesión del lunes pasado, la libra británica tomó impulso y comenzó a recuperarse de su nivel mínimo en más de dos meses y medio.
Aún a mediados de enero la libra cotizó a 1,32 dólares estadounidenses. Sin embargo, en los primeros días del mes de febrero comenzó a perder hasta llegar a niveles por debajo de 1,29 dólares. La caída más notable se produjo la semana pasada cuando la libra perdió casi 2,5 por ciento frente al dólar. Fue pérdida semanal más alta registrada en los últimas siete semanas.
La divisa británica se vio afectada por la incertidumbre en torno a la negociación sobre las futuras relaciones del Reino Unido con la Unión Europea. El acuerdo entre ambas partes debería estar listo antes de finalizar el año cuando vencerá el período de transición después de que Gran Bretaña saliera oficialmente de la Unión Europea a finales de enero. Los mercados se tranquilizaron el lunes a consecuencia del anuncio sobre el inicio de las negociaciones y la libra subió en un 0,6 por ciento.
La Comisión Europea presentó el proyecto de disposiciones normativas según las cuales el Reino Unido y la Unión Europea deberían reordenar sus relaciones comerciales, la justicia, asuntos de seguridad y de política exterior o las formas en que Gran Bretaña participaría en los programas comunitarios. En días próximos, los negociadores británicos se expresarán acerca de la propuesta.