Después de la formación del nuevo gabinete gubernamental en Italia parecía que los mercados quedarían por lo menos un tiempo estables.
Del nuevo Gobierno se esperó también un poco más de disciplina financiera que de su antecesor. No obstante, desde el final de la segunda Guerra mundial el scenario de la política italiana ha sido siempre muy inestable. Los analistas por tanto preveían que los electores podrían castigar en las urnas al líder populista Matteo Salvini, ante todo por su atrevido intento de negociar las elecciones anticipadas.
Sin embargo, pasó todo lo contrario. En los comicios regionales de Umbría, feudo tradicional de politicos de izquierda desde que terminara la segunda guerra mundial, la derechista Liga liderada por Salvini consiguió derrotar con amlio margen a su contrincante de coalición.
Los mercados reaccionaron según lo esperado – las ganancias de bonos emitidos por el Gobierno se han incrementado relativamente rápido. Los inversionistas se ven preocupados también por el hecho de que algunos funcionarios de los dos partidos aliados en el Gobierno ya hayan comenzado a culpar unos a otros por la derrota en dichos comicios regionales.
¿Por qué Salvini inquieta tanto a los mercados? Es combinación de dos factores. Su política económica se basa en la reducción de impuestos y el aumento de gastos públicos lo que la endeudada Italia ya no se puede permitir más. Otro motivo de preocupación de los inversionistas siguen siendo las las incesantes controversias de Salvini con la La Comisión Europea.