Hay tres empresas estatales chinas que ofrecen la conexión móvil superrápida: China Mobile, China Telecom y China Unicom Hong Kong.
El trío de operadores ofrece un servicio que será capaz de transmitir los datos a una velocidad cien veces mayor que la actual tecnología 4G. Y es más: los clientes podrán elegir entre tarifas que comienzan desde 18 dólares (es decir aproximadamente 415 coronas checas) mensuales.
En la actualidad, a la red 5G se puede acceder en cerca de cincuenta ciudades chinas, incluidas las megalópolis de Pekín y Shanghái. Sólo en la capital del país los operadores tienen a disposición cerca de diez mil estaciones de base 5G. En meses próximos entrarán en funcionamiento otras cien mil más en todo el país.
Inicialmente las redes de quinta generación debieron arrancar hasta a comienzos del año que viene, no obstante todo el proceso se aceleró, supuestamente a consecuencia de la presión ejercida por los Estados Unidos sobre la empresa Huawei. Washington considera a Huawei como una amenaza de seguridad en la introducción de las redes 5G y por tanto advierte a sus aliados para no cooperar con ella en la edificación de la infraestructura 5G.
Es verdad que China no es el primer país en haber puesto en marcha comercial la red 5G (de la red de quinta generación ya disponen algunas ciudades en EE.UU. o Corea del Sur) pero su red seguramente será la más extensa. China Telecom prevé que el número de clientes conectados a la red 5G aumentará durante 2020 a 170 millones de personas.