Las acciones de las blue chips europeas debilitaron sus posiciones antes del inicio de la reunión cumbre de la Unión Europea este fin de semana, debido al nerviosismo de los mercados ante los acalorados debates de los líderes europeos sobre el Fondo Europeo de Recuperación y la creciente tensión en las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China.
Durante la jornada comercial del jueves, el índice paneuropeo SOXX 600 bajó en 0,7 por ciento, después de que el día anterior llegara a cerrar al nivel más alto en las últimas cinco semanas. Las acciones del viejo continente fueron enviadas a la baja, entre otros, por los títulos de la cervecería neerlandesa Heineken (menos 4,9 por ciento) o la compañía de bienes de lujo Richemont (menos 5 por ciento). Las ventas de las dos empresas mencionadas se veieron afectadas seriamente en el segundo trimestre del año por la expansión de la pademia del coronavirus.
Entre los factores del mal humor entre los inversores europeos está la creciente tensión en las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China, la actitud del Banco Central Europeo que no ha llegado a cumplir las expectativas de los mercados en cuanto a otras posibles medidas en su política monetaria y el nerviosismo que suscita el complicado debate en la reunión cumbre de la Unión Europea, este fin de samana, acerca del Fondo Europeo de Recuperación.