Estados Unidos ha decidido renovar las sanciones contra el sector petrolero de Venezuela por las restricciones impuestas por el gobernante autoritario Nicolás Maduro a la capacidad de la oposición para presentarse a las elecciones presidenciales. Así lo han informado hoy agencias de noticias de todo el mundo, citando a un alto funcionario del Gobierno estadounidense. Washington endurece las sanciones seis meses después de que suavizara algunas de las restricciones tras el acuerdo de Maduro con la oposición.
Empresa PDVSA
Las empresas e inversores estadounidenses volverán a tener prohibido hacer negocios o cooperar de cualquier forma con la petrolera estatal venezolana PDVSA. Según el funcionario, se les dará un plazo de 45 días para cumplir con las sanciones y cesar todas sus operaciones.
Estados Unidos revierte así una medida favorable adoptada en octubre, cuando suavizó las sanciones a PDVSA. En aquel momento, el gobierno de Maduro se comprometió en un acuerdo con la oposición a permitir la presencia de observadores internacionales durante las elecciones de este año o que la oposición tuviera acceso a la prensa nacional. El gobierno también se comprometió a permitir que cualquier representante de la oposición se presentara a las elecciones.
Prohibición
En marzo, las autoridades electorales venezolanas no permitieron la inscripción de la candidatura de María Corina Machado, elegida por los principales partidos de la oposición como candidata conjunta en las primarias del año pasado, porque la política se enfrenta a una prohibición para ejercer cargos públicos. Machado dijo que se la prohibieron por razones políticas. Las autoridades ni siquiera han registrado al sustituto de Machado, y también han intensificado la represión de los críticos con el gobierno. La oposición considera que se trata de una clara violación de los acuerdos del año pasado.
Funcionarios estadounidenses expresaron su preocupación al respecto a funcionarios del gobierno venezolano la semana pasada. Sin embargo, según los medios de comunicación, EE.UU. se ha mostrado reticente a renovar las sanciones contra un importante exportador de petróleo por temor a que pueda provocar una subida del precio del crudo en los mercados internacionales y un aumento del número de emigrantes venezolanos que intentan llegar a EE.UU. en un año en el que el presidente estadounidense también se presenta a las elecciones.
Fuente: čtk