Mientras que el martes el oro trepó a sus máximos desde 2012, el miércoles fue marcado por una leve retiráda de sus posiciones debido a la creciente confianza en el dólar estadounidense en tanto que un „puerto seguro“ para los inversionistas.
El oro se aproximó en la primeramitad de la semana al límite de 1750 dólares por una onza troy que es el valor má salto en los últimos casi ocho años. Aún en la primera quincena de marzo, el precio del metal se encontraba por debajo de los 1500 dólares. El rally de oro de las últimas semanas se debe a las crecientes preocupaciones que suscita el futuro de la evolución económica global. En situaciones similares, el oro suele considerarse como uno de los activos seguros en los que conviene transferir los ahorros para protegerlos ante una evetual desvalorización.
Sin embargo, durante la jornada comercial del miércoles, el oro perdió casi un por ciento de su valor a consecuencia de la reacción de los inversionistas ante las recientes predicciones qie vaticinan que el futuro de la economía estadounidense no necesariamente debe ser tan catastrófico como se esperaba aún hace algunos días. Con un poco de exageración se podría afirmar que el oro cedió al segundo plano, siendo reemplazado por el dólar en su posición de „puerto seguro“ para los inversionistas. Al parecer, la situación se podría mantener durante un tiempo. Además, ha bajado también levemente el precio de los futuros del oro con entrega en el mes de junio.