El producto interno bruto de Estados Unidos creció un 7,4 por ciento intertrimestral en el tercer trimestre. Sobre una base anualizada, es del 33,1 por ciento. Se trata del mayor incremento intertrimestral del desempeño de la economía estadounidense desde 1947, cuando se comenzó a monitorear este tipo de datos.
En su conjunto, la economía estadounidense se recuperó tras caer un nueve por ciento en el segundo trimestre. Pero los analistas advierten que es posible que Estados Unidos aún no haya ganado. Por un lado, hay un incremento en los incrementos diarios de casos confirmados de coronavirus, y por otro lado, es difícil esperar que los paquetes de apoyo económico sigan operando en el último trimestre de este año.
En cualquier caso, esta es una buena noticia, especialmente para Donald Trump, quien ha estado estrechando poderosamente la ventaja de Joe Biden en las encuestas en los últimos días. La adecuación de la economía siempre ha jugado un papel importante en situaciones en las que el actual presidente de Estados Unidos ha defendido su mandato. Además, los datos positivos provienen del mercado laboral hace algún tiempo. A finales de septiembre, la tasa de desempleo estaba apenas por debajo del ocho por ciento, mientras que en abril todavía estaba en el umbral del 15 por ciento. Este fue el peor resultado desde la Gran Depresión en la década de 1930.