La empresa estadounidense de software Microsoft ha renunciado a su puesto de observador en el consejo de OpenAI. Según Microsoft, no es necesario que ocupe el puesto porque el liderazgo de OpenAI ha mejorado en los últimos ocho meses. La obtención del puesto en el consejo ha suscitado el escrutinio de los reguladores a ambos lados del Atlántico, según ha informado hoy Reuters.
Observación sin voto
Microsoft asumió el cargo de observador sin derecho a voto en el consejo de OpenAI el pasado noviembre, cuando Sam Altman regresó como consejero delegado. Conseguir el puesto significaba que Microsoft podía asistir a las reuniones del consejo y tener acceso a información confidencial. Pero no tenía derecho a voto y no podía tomar decisiones sobre la elección o selección de directores.
El puesto de observador y la inversión de Microsoft de más de 10.000 millones de dólares en OpenAI suscitaron la preocupación de las autoridades antimonopolio de Europa, Gran Bretaña y Estados Unidos. Esto se debe a la preocupación por el grado de control que Microsoft tiene sobre OpenAI. OpenAI se centra en el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) y opera el chatbot ChatGPT.
Preocupaciones constantes
Microsoft añadió que OpenAI ha realizado progresos significativos en los últimos ocho meses. Por tanto, confía en que la empresa vaya en la dirección correcta. En vista de ello, cree que su papel limitado como observador ya no es necesario.
La Comisión Europea (CE) dijo en junio que la asociación entre las dos empresas no estaría sujeta a las normas sobre fusiones de la UE porque Microsoft no tiene control sobre OpenAI. En su lugar, la CE solicitará la opinión de terceros sobre las cláusulas de exclusividad del acuerdo. En cambio, las autoridades antimonopolio de EE.UU. y el Reino Unido siguen mostrando su preocupación, así como sus dudas sobre la influencia de Microsoft en OpenAI y su independencia.
Fuente: Oficina de Prensa Checa